Las circunstancias de las sociedades avanzadas llevan, entre otras muchas cosas, a un envejecimiento de la población y el cambio en los roles y funciones familiares. Surge la necesidad de numerosos servicios relacionados con el acompañamiento y cuidado de personas mayores y dependientes. ¿Es lo que llamamos servicios integrales?
No exactamente. La gama de servicios de apoyo y ayuda que necesitan una persona y su familia es amplia y diversa, y los límites no siempre están claros. Por eso es interesante conocerlos cuando buscamos ayuda profesional para cuidar a nuestros seres queridos, y saber de qué hablamos cuando nos referimos a servicios integrales.
Las varias dimensiones del cuidado de personas
En la actualidad, los expertos del terreno de la atención de personas dependientes, sea a domicilio o en centros especializados, concuerdan en que el objetivo final de este tipo de cuidados es el de promover el bienestar y la autonomía de la persona cuidada. Desde esa perspectiva, estamos ante una tarea holística en la que el cuidador es pilar esencial.
Así, no cabe duda de que el cuidado de personas es una actividad polifacética que cubre aspectos muy distintos de la vida cotidiana. Estos aspectos incluyen la esfera puramente física del individuo, pero también la esfera doméstica (su espacio de vida, la casa, el barrio) y la esfera social (la familia, las relaciones sociales, las amistades, etc.).
Cuando el trabajo se realiza en casa, las fronteras entre el cuidado de personas y otras tareas del hogar son a veces difusas. Recordemos, por ejemplo, que el cuidado a domicilio no es lo que entendemos como servicio doméstico en sentido estricto, pero también lo implica de alguna manera y en algunas circunstancias: cuando el bienestar y la autonomía de la persona exigen ayuda en las tareas domésticas.
Actividades dentro de un servicio integral de cuidado de personas
Vamos a explicitar, enumerar y diferenciar los principales focos de atención que englobarían los servicios integrales de los profesionales del acompañamiento y el cuidado de personas mayores y dependientes de acuerdo con los criterios de la FIAPAM.
- Cuidados personales: los que se relacionan con las capacidades más básicas de la persona para llevar una vida independiente. Aquí entrarían principalmente el aseo y la higiene personal, la vestimenta y la alimentación.
- Cuidados sanitarios: estaríamos hablando por un lado de supervisión (estado de salud general y trastornos frecuentes, como movilidad y caídas, incontinencia, desorientación, depresión, etc.), y por otro de la gestión de tratamientos y medicinas.
- Cuidados habitacionales: el profesional se encarga de evaluar las condicione de accesibilidad de la vivienda, así como de realizar un mantenimiento adecuado cuando es necesario (lo que incluiría ciertas tareas de limpieza).
- Cuidados ocupacionales: las acciones lúdicas y terapéuticas como juegos, pasatiempos, hobbies, tareas, manualidades, deporte y gestión del tiempo libre encaminados a mantener niveles adecuados de actividad independiente.
- Cuidados sociales: los aspectos de interacción con otras personas, sean miembros de la familia, del círculo de amistades o de la comunidad, así como el acompañamiento en los momentos de ocio o en la realización de trámites.
Cuidados generales vs. cuidados específicos
Párrafo un error habitual es confundir “servicios integrales” con “servicios específicos”. Y es un error, ya que se trata exactamente de lo contrario: los servicios integrales son generales. Cualquier buen profesional del sector del cuidado de personas mayores y dependientes puede ofrecer un servicio adecuado si la persona cuidada no presenta necesidades específicas.
Entendemos aquí por necesidades específicas aquellas que requieren de conocimientos o de una experiencia altamente especializados. Un buenejemplo son algunas enfermedades incapacitantes y degenerativas que exigen cuidados muy concretos. O circunstancias particulares de la persona cuidada, como comportamientos autolesivos de origen psicológico o un sobrepeso difícil de gestionar.
Eso no quiere decir que en esos casos la familia no pueda contar con ayuda; quiere decir simplemente que en esos casos se debe buscar algo más, o distinto, de unos servicios integrales: atención altamente especializada a domicilio (siempre que sea posible), porque no todos los profesionales podrán atender de igual manera estas necesidades tan específicas.
A veces, es necesario un profesional
Hay ocasiones en las que es importante saber reconocer que necesitamos ayuda y que, por el bien de todos, es necesario contar con apoyo profesional.
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