Si la maternidad-paternidad constituye de por sí una tarea formidable para cualquier madre o padre, nuestra forma de vida actual añade incluso más desafíos a esta tarea. Esto es especialmente cierto en grandes ciudades, como puede ser Madrid. En especial, si queremos aplicar con nuestros hijos una crianza responsable.
Es posible que estés viviendo en primera persona esta situación en la que sientes que “no llegas”… Has de saber que es más común de lo que pueda parecer. En esta entrada reflexionamos acerca de por qué ocurre esto con más frecuencia que nunca, y del papel facilitador, en más sentidos de los que parece, de las asistentas externas de jornada completa para el cuidado de niños.
Las circunstancias de la vida moderna
Lo habías visto docenas de veces en amigos y familiares, e incluso te lo habían advertido, pero no te habías imaginado lo duro que es realmente criar a un hijo o una hija: la responsabilidad en enorme y los detalles a tener en cuenta, simplemente incontables.
A esta realidad se añade, en el contexto actual, que es casi imposible mantener un hogar si no trabajan los dos miembros de la pareja. Y más si vivimos en ciudades como Madrid, donde los desplazamientos que consumen buena parte de nuestro tiempo son inevitables.
Además, hay otros factores que complican aún más la situación. Si para las generaciones anteriores lo importante era dar un sostén económico a los niños, ahora prestamos una atención extrema a su bienestar en otros sentidos, sobre todo en la faceta emocional.
Y también hay que incluir en la ecuación otra realidad: los padres y madres de la actualidad somos, digamos, más “disfrutones”; es decir, para nosotros es muy importante no prescindir de actividades culturales, deportivas y de ocio en nuestra vida. Y eso está bien, verás…
A más felicidad, mejor crianza
Hoy por hoy no se discute que la crianza infantil pasa por unas prácticas de cuidado y guía que van mucho más allá de las necesidades básicas. El desarrollo psicológico, emocional, cultural y social es tan importante como el económico, educativo o ético.
Pero es difícil alcanzar semejantes niveles de autoexigencia respecto a nuestro papel como madres y padres si nuestro estado físico y emocional está bajo mínimos (¿te suena?). Así, resulta evidente el papel clave que juega la felicidad en la crianza infantil; no la de los hijos, sino la de los padres.
Seguramente te hayas visto en alguna situación en la que la mezcla de tus circunstancias personales (laborales y familiares las más de las veces) con tus deberes como progenitor/a (cambia pañales, haz la merienda, vamos al parque, tiene fiebre…) te han puesto al límite, impidiéndote hacerlo tan bien como quisieras y, desde luego, disfrutarlo.
Mayor salud emocional (para todos) con una niñera externa
¿Recuerdas eso del “tiempo de calidad” ? Tal vez haya llegado la hora de plantearse seriamente si merece la pena intentar llegar a todo, sacrificando por el camino la parte más positiva y gratificante de la crianza de tus hijos. Sobre todo, por su efecto sobre tus hijos.
En ese sentido, la principal función de una cuidadora para niños externa a jornada completa puede que no sea simplemente echarte una mano, o los aspectos más prácticos de su tarea (ayudar al niño o niña a vestirse, quitar la mesa del desayuno, recogerlo de la guardería). Seguramente su principal aportación sea mejorar el bienestar general de la familia.
Sabemos por experiencia que la mejor niñera es la que te ayuda en la redistribución de tareas, te apoya con conocimientos sólidos en los momentos críticos, y trata a los niños sobre las bases del cariño y el respeto. Toda una garantía para que los momentos que pases con tus hijos alcancen ese nivel de calidad que todos os merecéis.
¿A la caza y captura de la niñera perfecta?
En SelectiaHome sabemos bien que cada familia tiene sus circunstancias y que hay una niñera ideal para cada caso; y, también, ¡que no es nada fácil dar con ella! Nosotros te ayudamos.
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